Si trabajas de forma dependiente y reportas a un CEO, puede que en algún momento ciertas actitudes ofensivas de tu jefe te hagan acordar a ciertas conductas de ese hermano que te reprobaba y amenazaba si no hacías lo que esperaba. O en momentos la exigencia de tu jefe o socio de cierto control puede hacerte acordar a la actitud perfeccionista e hiper crítica hacia ti de tu propia madre. O en momentos que sientes que no te escuchan en las reuniones del directorio si tienes un cargo directivo y sientes que el director general no te escucha, puede que te haga recordar a tu padre, que era más bien distante y poco afectuoso.
¿Tu CEO te recuerda a su hermano mayor intimidante? ¿O la madre que siempre replegaba la ropa porque no hacía un trabajo lo suficientemente bueno? ¿O el padre emocionalmente distante que nunca lo elogió? Cuidado: lo más probable es que tu CEO esté recreando las mismas dinámicas que dieron forma a sus primeros años de vida familiar. Todo el equipo ejecutivo y su misión pueden sufrir a menos que el CEO lo reconozca y tome medidas conscientes para cambiar su comportamiento subconsciente.
Mi trabajo con los altos ejecutivos ha demostrado que los miedos profundamente arraigados, a veces irracionales pueden sesgar sus decisiones y su capacidad para ejecutar la estrategia de la empresa. Pero he encontrado otra influencia, igualmente arraigada, que afecta la forma en que tratan a los demás en la alta dirección: sus primeras interacciones con familiares y amigos.
La investigación ha demostrado que nuestras primeras experiencias familiares a menudo resurgen en nuestras interacciones de la vida adulta con los demás, incluidos los del mundo de los negocios. Al fin y al cabo, las familias son nuestra primera "empresa" y nuestros padres y hermanos son nuestro primer "equipo directivo".
La vida familiar temprana afecta la forma en que los líderes responden a la presión y reaccionan cuando los miembros del equipo compiten por su atención. Influye en si tienen relaciones cercanas o distantes con las personas que les informan, se comunican directa o indirectamente, micro gestionan o empoderan, fomentan debates o los cierran.
La psicoanalista Joyce McDougall describió un "teatro de la mente" cuyo guion se escribe en la infancia y se repite inconscientemente en otros entornos a medida que el niño crece. Dependiendo de la dinámica familiar y el destino, ese guion podría ser una comedia desopilante o un drama oscuro. ¿La familia mostraba apertura y confianza a lo nuevo o era más bien un lugar donde sus miembros se sentían controlados y vigilados? ¿Se alentaron o reprimieron las emociones? ¿Los padres eran cariñosos o no se involucraban? ¿La muerte de un padre, el nacimiento de un hermano o la inversión de la fortuna hicieron que la familia fuera más fuerte? ¿O causó divisiones y recriminaciones?
Marcelo es un CEO muy motivado y exigente dentro de una multinacional textil. Muchas veces su equipo se siente molesto por el feedback negativo que les expresa en público. Cuando Marcelo recordó su infancia, recordó que el negocio de su padre fracasó debido al fraude de un amigo de confianza. Eso le enseñó a Marcelo a no confiar en nadie y a vigilar todos los movimientos de los miembros de su equipo.
Abordar estos problemas de la infancia nunca es fácil, por varias razones. Para empezar, la mayoría de los ejecutivos ni siquiera son conscientes de que tienen problemas porque estos procesos y dinámicas son en gran medida subconscientes, a pesar de que se han convertido en poderosas influencias que se ciernen en lo que el psicólogo estadounidense William James llamó "la periferia de la conciencia". Aquellos que reconozcan vagamente sus problemas pueden verlos como rasgos de personalidad inmutables y los descarten con "así soy yo". Otros niegan sus problemas porque tienen miedo de parecer débiles entre sus compañeros ejecutivos o porque carecen de la conciencia de sí mismos para autoexaminar su pasado.
Este año en el X CALM Congreso de Autoestima y Liderazgo de Montevideo, vamos a examinar la influencia de nuestra familia en nuestro liderazgo porque dar a conocer los estilos de comunicación y relación que suelen tener sus raíces en las primeras experiencias familiares puede ser de gran ayuda para los ejecutivos, las personas que gestionan y sus empresas. A menudo, el solo hecho de reconocer que el CEO y otros miembros del equipo están representando la dinámica familiar puede provocar un cambio significativo y un mejor rendimiento del equipo.
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Es importante la familia, nos marca y es la fuente de nuestras alegrías y de nuestras tristezas